Dentro del mundo de la cirugía de la columna vertebral y como especialistas en el tratamiento de la hernia discal cervical, queremos detenernos en esta nueva publicación de nuestro blog en el tema de los factores de riesgo que influyen en el desarrollo de esta patología, en las posibles causas que pueden derivar en esta dolencia tan común en el campo de la Neurología.


Es evidente que, cuando envejecemos, los discos de la columna vertebral suelen tender a perder su flexibilidad y elasticidad. De hecho, los ligamentos que rodean a los discos se vuelven quebradizos y se desgarran más fácilmente. Por eso, en la consulta del Doctor Villarejo cuando se produce una hernia de disco, te recordamos que esta puede ejercer presión en los nervios espinales cercanos (radiculopatía) o en la médula espinal (mielopatía) y causar el dolor que trataremos de atajar por todos los medios.


La hernia de disco o hernia discal tiene varias formas de ser tratada. En algunos casos la solución pasa por sustituir el disco dañado por uno artificial. Esta es la alternativa más extendida teniendo en cuenta que nuestra columna vertebral se compone de muchas estructuras anatómicas diferentes, estructuras que incluyen músculos, huesos, ligamentos y articulaciones. Cada una tiene terminaciones nerviosas que habremos de tener en cuenta a la hora de planificar una cirugía de la columna vertebral. Recuerda que los discos intervertebrales son los tejidos que hay entre los huesos de la columna vertebral. Estos se componen de una parte central con una textura blanda similar al gel y un revestimiento exterior duro. Cuando ese revestimiento se desgarra es cuando hablamos de hernia de disco porque el centro blando puede sobresalir por la abertura.