Para muchos, recurrir a una operación de hernia discal cervical es la única manera de terminar con un problema tan molesto y peligroso. Y es que el dolor que produce una hernia puede ser terrible, incapacitándote para trabajar y para llevar la vida normal que siempre has tenido.
Por eso, si acabas de pasar por una operación de hernia discal cervical, una buena manera de prevenir la futura aparición de esos dolores es llevando a cabo una serie de ejercicios que te ayudarán a fortalecer la zona. ¿Los conoces? Nosotros te los contamos.
Lo primero de todo será determinar la frecuencia. Tampoco puedes arriesgarte a volver a llevar una rutina intensa y desenfrenada. Por eso, lo importante es rebajar los días de entrenamiento, y limitarte a entrenar en torno a tres días por semana. Intercalando siempre un descanso entre ellos para no forzar demasiado el cuerpo.
Lo principal pasará a ser trabajar la zona lumbar y abdominal, para que así sean los músculos los que se encarguen de sobrellevar los esfuerzos en esa parte y que, además, estén preparados para hacerlo. Por tanto, habrá que fortalecerlos. Olvídate de utilizar pesos muertos, ya que con el propio peso de tu cuerpo será suficiente.
Principalmente tendrás que realizar ejercicios de abdominales y de lumbares. Desde la plancha hasta el superman. Eso sí, todos ellos en muy pequeñas dosis para tampoco volver a sobrecargar la zona.
Con veinte minutos o media hora de ejercicios será suficiente. Y no olvides realizar estiramientos durante diez minutos para que el músculo no se dañe. Uno de ellos puede ser tumbarte boca arriba y sujetarte las piernas, quedando en posición fetal; de esta manera tus lumbares y tu espalda se estirarán.
Si tienes cualquier dolor por la zona cervical, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Somos Villarejo, F.